miércoles, 23 de octubre de 2019

El Merengue Leña que se quema

El merengue leña que se quema es un merengue grabado originalmente por la orquesta Santa Cecilia de Luis Alberti y cantado por Pipí Franco. Fue un merengue que se popularizó bastante en su momento pero que sin lugar a dudas ha quedado grabado en la memoria de la gran mayoría por ser el merengue de las Águilas Cibaeñas del béisbol dominicano.

Este popular tema de merengue se grabó en 1951 perteneciente a la producción Luna Sobre el Jaragua, pero es mucho más antiguo de esa fecha y fue un tema muy bailado en los salones de baile de la época. La inconfundible voz de Arcadio (Pipí) Franco es que le dio el toque final a este tema para que pegara y permaneciera en el gusto popular por tantos años.

El merengue Leña que se quema sin lugar a dudas pasó a la posteridad gracias al equipo de Béisbol Águilas Cibaeñas que lo tomó como su grito de guerra para animar a sus fanáticos cuando es siempre colocado por las bocinas en el séptimo inning cuando juegan en el Estadio Cibao.  Cuenta la historia de que en 1937 (primer año que el equipo de Santiago jugó bajo el nombre “Águilas Cibaeñas”), en el Enriquillo Park de Santiago, se inició la costumbre de amenizar los juegos con orquestas y conjuntos; le tocó en suerte a la ciudad santiaguera disponer de la mejor orquesta dominicana de su generación, la Lira del Yaque, fundada y dirigida por el profesor Luís Alberti, la misma que poco después fue bautizada, ya en San Cristóbal, con el nombre de Orquesta Generalísimo Trujillo y posteriormente Santa Cecilia.  A partir de la séptima entrada del equipo del Cibao, la orquesta entraba con el merengue Compadre Pedro Juan, considerado a la sazón como el himno de las Águilas.  Para ese tiempo, la orquesta tocaba principalmente las danzas de Juan Morel Campos y boleros suaves en la voz de Arcadio (Pipí) Franco.  

Y fue así hasta que un día, un juego entre Águilas y Dragones de Ciudad Trujillo (fusión de Escogido y Licey), a la altura del séptimo episodio, perdía el equipo del Cibao 2-1 y la orquesta tocaba una suave danza, cuando sorpresivamente las Águilas batearon jonrones consecutivos del receptor Spahn y el -Jabao- Palmer, para virar el marcador 3-2.  Ese fue el momento seleccionado por el -Pinto- Santos y su bocina para vociferar, coreado por el público, ‘qué danza ni danza, toquen el merengue Leña, que eso es lo que le estamos dando a los capitaleños’, siendo complacido por el maestro Alberti y su orquesta”. Luego de esto se convirtió en el grito de guerra de las huestes cibaeñas, las aguerridas Águilas Cibaeñas

El merengue leña que su lirica nos habla de un hombre enamorado de una joven que no es correspondido. Sin lugar a dudas que lo que hizo que se popularizara el tema fue el buen arreglo o orquestación que tiene el mismo. La voz de Pipí Franco también le da ese toque peculiar que tiene.
De este merengue se han hecho muchos covers o versiones por otras orquestas de merengue tales como Billo’s Caracas Boys, El Gran Combo de Puerto Rico, El Conjunto Quisqueya, Fernando Villalona y quien más lo popularizara recientemente, Héctor Acosta el Torito.

Aquí colocamos el tema Leña en su versión Original cantada por Pipí Franco:

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